miércoles, 16 de diciembre de 2009

CAPITULO 5.

5 SEMANAS ANTES.
Black Jackson sacó a relucir su enorme revolver y empezó a frotarlo. Suspiró observando su despacho, su viejo despacho, tan cubierto de polvo como de buenos momentos. Cuanto hechaba de menos los viejos tiempos, cuando uno podía entrar a saco, llenar de plomo a los malos y irse con la chica.
Ahora había que rellenar mil informes para poder mear, y si atrapabas al criminal con algo que no fuera un "Porfavor venga conmigo señor" aún te denunciaban ellos a ti para que te dieran bien por culo los putos chupatintas.
Dejó su magnum sobre la mesa probocando una nuve de polvo. Se levantó y estiró sus brazos hacia el diploma de la pared "Al mejor Negro al Servicio de América". Sopló para sacarle el polvo de encima, aquel trozo de cristal enmarcado en madera vieja era el orgullo de Black Jackson. Siendo negro había tenido que luchar el doble que todos los demás, incluso el triple, para llegar donde estaba. Era el mejor detective de toda la ciudad, aunque el trabajo escaseaba. Los tiempos habían cambiado y la gente solo contrataba detectives para casos de infidelidad, ya no había acción, ni persecuciones. Solo polvo sobre la mesa.

Un fino puño apareció en la ventanilla de su puerta, golpeando en la "v" de -Detective Black Jackson-. Al momento una despampanante mujer de color con el pelo a lo afro como él, de enormes pechos y fulgurante cadera entró en su habitación, inundándola de olor a hembra.
La invitó a sentarse y esta así lo hizo, cruzando una pierna sobre la otra, forzándo hasta los límites el tejido de la falda de su vestido dorado.
Sus pechos se inflaban y desinflaban mientras sus ojos marrones buscaban los suyos.
Se llamaba Afrodita y necesitaba urgentemente que él la protegiera, y le dijo que solo tenía una manera de pagarle mientras que con un -zip- abría la cremallera del vestido y quedaba totalmente desnuda frente a el.
Black Jackson respondió quitándose la ropa, con su cuerpo totalmente desnudo y sus enormes músculos en tensión la cogió y la lanzó sobre la mesa. Saltó luego sobre ella e intentó besarla una y otra vez. Pero sus peinados afros chocaban entre sí haciendo rebotar sus cabezas.
Así que dejó de lado los preliminares y le hizo el amor durante horas, hasta que la mesa deshizo bajo ellos y la lámpara les cayó encima.

Dos minutos después de la rubísima enfermera empezara a cabalgar sobre su esmirriado paciente esté soltó un sonoro aullido de placer. Le miró y a pesar de que aquel piltrafilla ya había acabado ella siguió saltando sobre el, como intentando exprimirle las últimas gotas mientras no paraba de reir tontamtente.
Se llamaba Gina, sus medidas físicas sobrepasaban por mucho la perfección y sus mentales, bueno, eran más bien inexistentes. Era la sobrina del director del hospital y este la había enchufado como ayudante de ayudante del Auxiliar médico. Resumiendo, nadie le mandaba nada porque todo lo hacía mal y luego había que rehacer sus desastres y además hacer la tarea que le habían mandado.
Aún así, puede que Gina fuera algo tonta, pero tenía un corazón que no le cabía en el pecho, y eso era decir mucho. Escuchaba a los enfermos y reía con ellos, siempre reía y esto hacía sonreir a los enfermos, lo cual nunca era malo.
Y estaba enamorada, perdidamente enamorada de aquel piltrafilla que intentaba salir de debajo de ella. Era un panadero al que tenían encerrado siempre en aquella habitación, y estaba solo como ella. Solo con él conseguía hablar sin miedo a meter la pata, él nunca la reñía ni se mofaba de ella. Y le encantaba hacer el amor con el -aunque nunca le durara nada- y notar sus pálidos cuerpos unos junto al otro.
En esta indecorosa posición les pilló el camillero con pinta de asesino en serie. Esté entró sin llamar en la habitación y, tras darle un puñetazo a él se la llevó a ella a rastras cerrando la puerta tras de si.
El enclenque panadero cayó al suelo tras rodar sobre la cama y luego se abalanzó sobre la puerta, golpeando la misma con desesperación.

Te rescataré, lo juro. ¡¡Afrodita iré a buscarte!!!

4 comentarios:

ALDERAN dijo...

Yee, que en los otros dos no comenté nada, pero que me molaron igual o más que los anteriores, si cabe, al igual que este quinto capítulo.

En este me has dejado flipao con el cambio de escenarios(y de tiempo, claro), no tardes mucho en continuar que me tienes en ascuas! xDDD.

Vixvapurus dijo...

Vaya me alegra saberlo xDD

Asias por el comment!!!!
Sobre el 6º capítulo me da que está al caer, que me lo ha dicho un pajarito xD

Rohane dijo...

Mira, Afrodita es como Michael Jackson, pasa del negro al blanco y tó!!! xDD genial tio, lo de Black Jackson lo veo en blanco y negro al estilo antiguo de las pelis de detectives...y bueno..a la mente me viene un capitulillo de Calico Electrónico...pero eso es otra historia xD

Vixvapurus dijo...

Estoooooo algo como Michael Jackson shi shiiii claaaroh xDDD

Digamos que el siempre ha sido así, blanco y negro a la vez, piltrafilla pero "machote" sin saberlo xD